Por lo general, la psoriasis tiene consecuencias psicológicas en las personas que la padecen.
Sensación de exclusión
- Por lo general, la psoriasis provoca que la persona afectada se sienta excluida. Esta sensación le impide llevar una vida normal.
- Esto se debe a que las placas de psoriasis aparecen en zonas visibles (el rostro, las manos y los brazos).
- Cuando estas placas aparecen, las personas afectadas no tienen deseos de salir o de ir a la piscina (p. ej.) y adoptan una actitud de repliegue en sí mismos.
Algunos prejuicios relacionados con la psoriasis
- La psoriasis es una enfermedad poco conocida.
- Muchas personas creen erróneamente que la psoriasis es una enfermedad contagiosa y se alejan de las personas que padecen esta enfermedad.
Pérdida de la autoconfianza
Por lo general, las personas que padecen psoriasis suelen perder la confianza en sí mismas y viven en un estado de estrés permanente.
Estrés y psoriasis: un círculo vicioso
- Un trauma psicológico, una gran angustia, una discusión o cualquier otra situación de estrés podría agravar los síntomas de la psoriasis.
- Muchas personas que padecen psoriasis no afrontan esta enfermedad de la mejor manera y viven en estado de gran estrés.
- La opinión de los demás, el temor de que las placas de psoriasis vuelvan a aparecer y la sensación de ser diferente y poco seductor generan un estado de estrés que agrava la enfermedad.
Depresión
- Las personas que padecen psoriasis en ocasiones presentan muchos trastornos psicológicos en su vida cotidiana.
- Con el paso de los meses o de los años, estos trastornos podrían provocar una depresión.
Tratamiento de las consecuencias psicológicas de la psoriasis: